La tecnología ha cambiado la forma en la que entendemos el mundo de los viajes. Antiguamente las personas viajaban por lo que les contaban, por los libros que leían y por la ganas de viajar a aquellos lugares que soñamos. Ahora casi podemos conocer y entender los destinos turísticos sin movernos de nuestra casa, aprovechando todas las ventajas de las tecnologías de información y comunicación.

Es posible entrar a conocer catedrales y castillos, revisar mapas, rutas, climas y también eventos, así como alojamientos, lo que permite que al llegar al destino lo entendamos, disfrutemos y valoremos.

Pero lo anterior siempre vale la pena, si dejamos también algo a la aventura, no conocer todo, dejar que un destino nos sorprenda. Ya que eso permitirá que el gusto de viajar y disfrutar sean permanentes.  El tener todo conocido desde antes puede volver a los viajes una monotonía, algo mecánico que va contra la esencia misma de viajar.

Leer y Viajar.

Viajar debe de ser una experiencia que cambie la forma de ver nuestro mundo, que al conocer otras culturas le demos valor a la nuestra y que se pierdan perjuicios.

Para preparar un viaje, hay que leer sobre el lugar, sobre cómo llegar, donde hospedarse, revisar comentarios, saber si los requisitos migratorios cambiaron y también leer sobre quien vivió ahí, que influencia tuvo y que dejo a la ciudad.

Para organizar mejor sus viajes, recomiendo el libro del gran escritor y filosofo español, Fernando Savater: “Las ciudades y los escritores” en donde reflexiona sobre la vida de grandes autores y las ciudades en donde vivieron.

Fernando Savater (Photo by Juan Manuel Serrano Arce/Getty Images)

¡Viajemos Juntos!